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Luna llena

 

El metro de Barcelona

está atestado de vampiros

pero de vampiros ascetas

rigurosos en su ayuno

 

Practican con fruición

la higiene del alma

aun sin alma

 

Los hombres lobo y

los osos grises disputan

por la sangre y la miel

—néctar de las adolescentes—

en el monte Carmelo

 

y los carneros rojos de

Voltaire

están siempre lejos

siempre a tiro de piedra

 

 

Tax free

 

A las nueve

se citaron los citadinos

pidieron un rioja

y una tabla de quesos

 

A las once

no habían probado bocado

y estaban sumidos

en el silencio y la incomodidad

de saberse hostiles e idiotas

 

Acordaron no volverse a ver

pero tres días después

se cruzaron en la calle

y dijeron “Qué tontos

con lo que nos gusta

el vino y el buen parmesano”

 

Se citaron a las nueve

en un viejo bodegón

viejo como las viejas costumbres

y los malos hábitos

 

y a la cita acudieron

dos fantasmas tristes

apenas reconocibles

por sus contornos difuminados

a la luz del farol

 

En cambio los citadinos

estaban en el bar de enfrente

algo borrachos y otro poco

fingiéndolo

 

diciendo cosas a las chicas

haciendo planes

tallando y retallando gestos

sobre sus caras de piedra

 

sobre sus bíceps cuadrados

de marineros en puerto libre

 

 

Ferlandina 22

 

Acodado en el balcón

veo pasar con lástima

el último estado de pánico

que dobla la esquina

rengo y mal vestido

 

Mejor observar

a la inglesita del segundo

descolgar la ropa con

unos dedos que ya querríamos

ver en su coño

al escritor del tercero

tosiendo y escupiendo

calle abajo

 

un adelanto de la lluvia

que amenaza con caer

desde un cielo cerrado

a la mirada de los ángeles

 

 

Nieve

 

Un paisaje blanco

un vestigio ona o siberiano

un paisaje de arena

o mar adentro

el agua al cuello los tiburones

 

Descubrí que me llamaba Pedro

que ni remotamente

era el depositario de mi memoria

 

Descubrí que no tenía nombre

que mi cuerpo era el de una serpiente

enroscada sobre su presa

 

 

Los perros

 

Los perros en jauría

rodean la casa

 

no piden ni exigen

toman esto y aquello

 

Rodean la casa

pero la casa está vacía

y la ciudad abandonada

 

El mar devuelve

sobre la costa detritos

y formas inacabadas

 

lo que no pudimos

llevarnos

lo que preferimos

olvidar

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